El despertador sonó, sacando a Jenny del mundo de quienes duermen sin soñar. Se estiró y lo apagó. Lentamente, salió de la cama y, sin hacer ningún ruido, se dirigió al baño; sus padres seguían durmiendo.
Tomó una ducha muy rápida, volvió a su cuarto, se secó, vistió, peinó, tomó su bolso y salió. Compraría algo para comer en el camino, pero, si no salía, llegaría tarde.
Se sorprendió al ver, apoyado en el auto que estaba estacionado fuera de su casa, a Billie Joe, con un café en un vaso desechable, sostenido en su mano.
-¿Qué haces aquí? –preguntó ella, sorprendida.
-Hola, Billie. ¿Cómo estás? Que bueno que estés bien. Oye, ¿qué haces por aquí a estas horas? –ironizó Billie. Jennifer sonrió-. Te vine a buscar. Sé que no quieres subirte a ningún autobús por un buen tiempo, así que...
Ella sonrió, recibiendo el café que él le pasaba.
-Muchas gracias.
Se subió al asiento del copiloto, mientras que él subía al del conductor. Echó a andar el auto y se alejaron de la casa.
-Bueno... ¿Adónde te estoy llevando? –preguntó, haciendo que ella riera. Jenny le dio las indicaciones- Excelente, cerca de una plaza
La adolescente notó cuan melancólico había sonado eso, pero no hizo ningún comentario, aunque dirigió una disimulada mirada al asiento trasero, donde se veía el estuche de la guitarra eléctrica que debía haber en el interior.
Jennifer negó.
-Te dice las cosas que podrías arreglar y cómo. También me ayuda a decidir que capítulos son basura y cuales son excelentes. Además, aguanta todas las estupideces que les hago a los personajes –explicó rápidamente, con una sonrisa.
-¿Cómo cuáles estupideces? –preguntó Billie Joe, interesado.
-Tengo una tipa con un enredo familiar más grande que Sudamérica –dijo a modo de respuesta-. Y a otra le maté a todos antes de la mitad del primer capítulo.
Billie la miró sorprendido.
-With an angel face and a taste for dead –cantó, haciéndola reír nuevamente-. Así era originalmente, pero no calzaba, así que pusimos “suicide”... A Mike y Tré no les agradó la idea, pero bueno... Así eran ellos...
Su voz se cortó. Mencionar a quienes habían sido sus dos mejores amigos como si estuviesen muertos, era tan terrible como perderlos otra vez.
-Los extrañas, ¿cierto? –inquirió Jenny, delicadamente. Él sólo asintió- Las cosas se arreglarán, te lo aseguro...
Billie lo descartó con un simple movimiento de su cabeza.
-Les dije cosas que nunca perdonarán... Tú pensarás que lo que le dije a Tré no fue tan malo, pero... Bueno, la forma en la que se lo dije... Aún si me perdonaran, su orgullo no les permitiría hablarme ni nada –musitó.
Jenny negó.
-Se arreglarán, estoy segura...
“Creo que requerirán de un pequeño empujón” pensaba mientras decía eso. ¿Qué idiotez se le estaba ocurriendo?
-Bueno, me llamas cuando estés lista –le dijo Billie, cuando estaban por llegar.
-No tengo tu número –dijo ella, con tono de obviedad.
Billie sonrió. Sacó una hoja muy arrugada de papel de un bolsillo, recogió un lápiz del suelo del auto y le anotó el número de su celular.
-Me llamas, ¿eh? No quiero que te vayas sola.
Ella sonrió, mientras el auto se detenía frente al edificio de la editorial de Paul Hayes.
-Muchas gracias, Billie –agradeció ella.
Le dio un beso en la mejilla y bajó.
Ya en el interior, corrió hacia el ascensor y subió en él los cinco pisos. Paul la esperaba, con una sonrisa en su rostro, surcado por arrugas, única señal de que su juventud estaba escapándosele de las manos.
-¿Cómo estás, Jenny? –preguntó él, aún preocupado por lo del accidente.
-De maravillas –respondió honestamente. Paul alzó una ceja-. En serio, no me pasó nada. Sólo quedé llena de moretones y algunos movimientos hacen que me duelan nuevamente los lugares de los golpes, pero eso es todo.
-¿Cómo te viniste? –inquirió, preocupado.
-Un amigo me vino a dejar –contestó.
No estaba segura de que el editor le hubiese creído, pero le daba igual. Se limitó a sentarse en el sofá que solía usar. Paul suspiró y se sentó en otro.
-¿Me traes un final?
Jenny sonrió.
-Al fin uno bueno –contestó, con una amplia sonrisa.
Así empezaron a trabajar.
Soy adicta a tu novela!!!*o*
ResponderEliminarMe la he leido mcuhas veces y no me canso!!